COVID-19 Nacionales

¿Qué podemos esperar los trabajadores del nuevo directorio legislativo?

Por: Pabel Bolívar

San José, may 2020 (Socialismo Hoy) – La Asamblea Legislativa eligió el nuevo directorio para el periodo 2020-2021 donde figura como presidente Eduardo Cruickshank de Restauración Nacional, esto mediante un acuerdo entre el PAC y el PLN. Tal votación ha generado expectativas entre la población por ser el primer presidente afrodescendiente

El marco de referencia de este acuerdo es el COVID 19 y la dura situación económica del país; los partidos del régimen justifican el acuerdo al decir que “hoy hay que estar más unidos que nunca”. Pero ¿unidad de quiénes y para qué? Este artículo tratará sobre la dinámica legislativa para el próximo periodo.

El primer afrodescendiente en la presidencia de la Asamblea

Vale la pena hablar algo que los mismos diputados y los diferentes medios de comunicación destacan: el hecho de tener por primera vez a un afrodescendiente como presidente del congreso.

Sin embargo, durante estos dos años de diputado, Cruickshank ha sido uno de los principales impulsores de la agenda conservadora, contra el matrimonio homosexual y la legalización del aborto. Su acción tampoco ha sido beligerante para combatir el racismo y la discriminación de la población afrodescendiente, que se ven afectados por el desempleo y la pobreza en la provincia de Limón.

Es defensor de las políticas económicas neoliberales (a favor de la concesión de los puertos, la ruta 32 o los privilegios a las grandes bananeras y piñeras) que tienen a Limón hundida en la miseria, por lo que se considera un fiel representante de los intereses de los ricos.

¿Qué pueden esperar los trabajadores de esta Asamblea Legislativa?

Este parlamento y su nuevo directorio no nos representa. A los pocos días de haber asumido aplaudieron el plan del gobierno de 900 mil millones de colones para salvar a los grandes capitalistas en plena pandemia.

Ahora bien, se firmaron varios compromisos entre las fracciones que nos dan una idea de los proyectos que van a impulsar. El primer eje tiene que ver con la “reactivación de obra pública para generar empleo”. Esto implica continuar con la ley de concesión de obra pública que beneficia a un puñado de megaempresas constructoras como MECO y H Solís.

El segundo compromiso es con la “reducción de gastos”, esto es seguir atacando las condiciones de vida y las conquistas de los trabajadores del Estado mediante la aprobación de la Ley de Empleo Público y recortes al presupuesto nacional.

También se habla de “simplificación de procesos” que en los hechos es darle todavía más beneficios a las grandes empresas para que vengan al país, se enriquezcan y exploten más a los trabajadores aprovechando la dictadura patronal que impera en el sector privado.

Esta es la agenda neoliberal que impulsa el gobierno y la UCCAEP, la cual tiene un impulso mayor debido a que la agencia calificadora de riesgo Fitch Ratings redujo la nota crediticia de Costa Rica de ‘B+’ a ‘B’ en medio de la crisis del COVID-19.

La reducción de la nota es una orden para seguir aplicando más ataques que los diputados aceptan de buena gana. Bajo el segundo gobierno del PAC el país ha profundizado su dependencia hacia el imperialismo mediante un fuerte endeudamiento, una de las raíces principales del déficit fiscal. Uno de los grandes compromisos de este directorio legislativo es continuar con los pagos puntuales de la deuda.

El Frente Amplio, si bien no firmó este acuerdo, sigue formando parte del gobierno de “unidad nacional” junto con el PAC y el PLN. Patricia Mora continúa al frente del INAMU que avaló los recortes que afectan sensiblemente el combate a la violencia machista.

José María Villalta de manera vergonzosa se sometió a los dictados de la UCCAEP al votar a favor de la suspensión de los contratos de trabajo; una de sus figuras públicas, Sofía Guillén, integra una mesa de diálogo con figuras de la derecha.

De esta asamblea legislativa no podemos esperar nada más que proyectos antipopulares y ataques a las condiciones de vida del pueblo pobre. Es la asamblea de los banqueros, de los terratenientes, de los grandes ricos y los políticos corruptos, por eso el discurso de unidad nacional es una farsa al servicio de los intereses de los millonarios

Hay que seguir denunciando ese carácter burgués del parlamento, al mismo tiempo que hacemos un llamado a la clase trabajadora a organizarse y luchar de manera unificada e independiente de los partidos de la patronal, contra los planes de ajuste que están en marcha y los que vienen en camino.