San Jose, 02 de abril 2020 (SocialismoHoy.com) – La denuncia que la familia de Alfredo Mesen realizó este lunes, pone en evidencia no solo que el manejo de la crisis del COVID-19 no está siendo tan impecable como lo muestra el Gobierno en las conferencias de prensa, si no que la negativa del Ministerio de Salud de realizar pruebas en todos los casos obliga a las personas a acudir a la salud privada para garantizar la atención debida del virus.
Según la denuncia realizada por Amanda Mesen, hija de Alfredo, adulto mayor que hoy se encuentra en una condición de salud crítica por los efectos del coronavirus, la clínica Marcial Fallas le negó en dos ocasiones la realización de la prueba para comprobar si su padre estaba infectado o no.
Pero más aún, una tercera negativa se dio cuando su madre, Consuelo Badilla, quien cuidó a Alfredo los días que estuvo enfermo antes de finalmente ser hospitalizado, solicitó una prueba al conocer que su esposo ya era positivo al COVID-19, y nuevamente en la línea de atención del Ministerio de Salud se le indicó que acudiera a un laboratorio privado para hacerse la prueba.
Ministro de Salud anuncia laboratorios en conferencia de prensa.
El propio ministro de Salud, Daniel Salas anuncio en la conferencia de prensa de este lunes, que su Ministerio le dio el visto bueno para que tres nuevos laboratorios privados realicen las pruebas de COVID-19.
Con esto el gobierno promociona a los laboratorios como una opción alternativa a las pruebas en la CCSS, sin decir que para muchas personas esos laboratorios serían su única posibilidad ante la aplicación de un protocolo selectivo en el sistema público.
Al 31 de marzo, el Ministerio de Salud ha dado permiso a 8 laboratorios privados para que realicen pruebas a las personas que tengan síntomas o sospechas de contagio.
Es posible que como en el caso de Alfredo Mesen, deban acudir a esos laboratorios privados, las personas que tengan síntomas y no sean recibidas en los centros de salud de la CCSS.
Desgraciadamente no todas las personas a las que se les nieguen las pruebas en el sistema de salud pública podrán acudir a lo privado, ya que si se toma como referencia el precio de Clínica Biblica, una persona debe pagar ₡238 000 para acceder a una prueba para el COVID-19.
