La ministra de Educación Anna Müller en congreso realizado en la ULACIT, deja claro hacia dónde va la “ruta de la educación” planteada por el Gobierno: un modelo educativo capitalista.
El presupuesto más bajo en años
Por Constitución, debe destinarse un 8% del PIB para financiar educación pública. Ello no se ha cumplido (actualmente llega al 6,5%). Incluso, la ministra cuestionó en ese congreso, la base científica del 8% a pesar de los reclamos de la comunidad educativa y de un último informe del estado de la educación que ilustra el panorama actual: desfinanciamiento, problemas de infraestructura, deserción, interinazgo excesivo…. La ministra afirma que todo va bien en “su ruta por la educación”.
¿Qué es el “apagón educativo”? ¿Quiénes son los responsables de la crisis?
“Apagón educativo” es un discurso y política donde el gobierno, la burguesía y los medios defienden que el rezago, es culpa centralmente de la pandemia y las huelgas. En ningún momento mencionan al endeudamiento y a la regla fiscal como los responsables.
El Gobierno y la OCDE son los verdaderos culpables del “apagón”. Se mete a educación en la regla fiscal y se sigue religiosamente pagando la deuda, afectando la inversión en educación pública que se refleja en: pésima infraestructura, recortes en becas, recrudecimiento de condiciones laborales (sobrecarga de trabajo, grupos enormes, reducción de lecciones y congelamiento de plazas) e incluso cierre de programas como los CNMVTS, generando deserción, cierre de matrícula y cese de nombramientos, afectando a estudiantes trabajadores, la población meta de este programa.
La “ruta de la educación” es una política del Gobierno dictaminada por la OCDE: un punto medular de esta es la evaluación por competencias: se gastan millones en las pruebas estandarizadas (que busca “medir habilidades”) a pesar que no hay plata para materiales para suplir necesidades básicas, pero sí para exigir que se realicen sin contextualizar la realidad de los centros educativos.
El programa a levantar: A organizar desde las bases estudiantiles y sindicales la lucha
La juventud ha luchado contra las pruebas FARO, contra las pruebas estandarizadas y en defensa del FEES en las calles, a pesar de la represión y las burlas del presidente Chávez y la ministra. Las bases de los sindicatos del magisterio también lo han hecho, se han movilizado sin el apoyo de las burocracias sindicales del magisterio por pago justo y en defensa del FEES a pesar de la ley antihuelgas.
Para poder luchar y garantizar 8% en educación, debemos unificar esas luchas desde las bases, para derogar la ley antihuelgas y sacar a educación de la regla fiscal. Que haya una auditoría y no pago de la deuda usurera. Que en el sector público haya sindicatos democráticos y combativos. Por sindicatos en el sector privado, para tener más músculo para la lucha, porque la crisis en educación pública afecta a toda la clase trabajadora.