Nacionales

Algunas lecciones sobre el caso de la CCSS y la detención de Marta Esquivel para la clase trabajadora

El día 25 de setiembre a razón de la detención de Marta Esquivel y otros personeros de la CCSS, detenidos por la fiscalía por la adjudicación de 138 EBAIS y 10 áreas de salud con un enorme sobreprecio a las cooperativas Coopesana, Coopesalud, Coopesiba, Coopesaín y Asemeco[1], El presidente Chaves vuelve a atacar a las instituciones y en este caso a la fiscalía por el “mal trato” a Esquivel. Después de ello, siguió argumentando que los ciudadanos deben estar preparados ante una eventual movilización, dando a entender que las diferencias se resuelven ya sea en las urnas y que la paz era la única arma…[2]

A raíz de esto, figuras como Eli Feinzag, diputado del PLP, la Asamblea Legislativa, e incluso el FA, vuelven con el discurso de “defensa de la institucionalidad” o “del buen actuar de la fiscalía”.  Por ende, queremos debatir sobre estas posiciones y cuál debe de ser la postura nuestra ante este conflicto para sacar algunas lecciones para la clase trabajadora.

1. Sobre la defensa de la CCSS y su organización

El seguro social y la figura de la CCSS es una conquista histórica de la clase trabajadora. Al sistema económico capitalista no le gusta la figura del seguro social, porque el empresariado y los gobernantes, buscan lucrar, por medio de la figura de la privatización y la terciarización, por eso, la clase trabajadora debe estar vigilante, y defenderla por medio de organización, por medio de sindicatos, y haciendo unidad con otros sectores populares y comunales. No siguiendo la línea que maneja por ejemplo el FA, de defenderla aplaudiendo a la CGR o a la fiscalía, ya que estos organismos varias veces han fallado en contra de la clase trabajadora. Los miembros que conforman las directivas de la CCSS o el Ministerio de Salud deberían tener representación de la clase trabajadora y las comunidades, votados en asambleas democráticas, con rendición de cuentas de labores e informes económicos con carácter público.  

2. Sobre “la defensa de la institucionalidad” y la denuncia a Chaves por sedición

Eli Feinzag es un empresario, ligado con anterioridad al PUSC, a la figura del gobierno de Miguel Ángel Rodríguez, expresidente que ha proclamado su defensa por la privatización y tercerización de la CCSS. Él hizo el llamado a denunciar por Sedición a Chaves abogando por la defensa de la institucionalidad.

Esto, no muestra más que la hipocresía y que en realidad es una pugna inter burguesa como muchas otras entre Chaves y los poderes de la república o cierto sector empresario y partidos como el PLN y el PUSC. La clase trabajadora debe estar preparada para posicionarse frente a estas rencillas entre poderes de la república o figuras del empresariado y la burguesía, porque van a querer utilizar al pueblo trabajador para su antojo.

Prestemos atención al ejemplo del llamado a sedición: Según el art. 4, “Ninguna persona o reunión de personas puede asumir la representación del pueblo, arrogarse sus derechos, o hacer peticiones a su nombre. La infracción a este artículo será sedición”, que se tipifica bajo la rebelión o la traición.

Chaves en varios momentos lo que ha hecho es que, al no tener apoyo en sus políticas, no porque vayan en contra del empresariado o bien, a favor del pueblo, es que choca con ciertos intereses de la clase empresarial y los privilegios de los poderes de la república. Ello ha pasado con los argumentos que el da como lo del Parque Viva y ahora lo de la CCSS.

Ahora bien, el delito de sedición ya ha sido mencionado recientemente durante el gobierno de Alvarado, cuando en la oleada de protestas del 2020, se utilizó para amedrentar a los manifestantes[3]. Por eso decimos, que no debemos enredarnos con ello, el punto central aquí, es que Chaves no es ni amigo del pueblo trabajador ya que sigue desmantelando la salud y la educación pública y es cabeza de uno de los mayores ataques y actos de corrupción que afecta al seguro social.

De allí partimos con el segundo elemento central, la supuesta defensa de la institucionalidad. Las instituciones como los ministerios son parte del régimen. El régimen de nuestro país es un régimen democrático burgués, porque defiende los intereses del Estado burgués, que defiende los intereses del empresariado y el sistema capitalista, por ello, defender la institucionalidad como tal, es defender el orden actual, es defender un ministerio de hacienda que tiene congelados en pago de deuda del Estado a la caja, es defender la CGR y la Sala IV, que han fallado contra la clase trabajadora con por ejemplo la ley antihuelgas. Incluso hoy día, el FA y las Universidades defienden este bloque de defensa de la institucionalidad.

La clase trabajadora, debe defender la CCSS, pero defender la seguridad social y el sistema de pensiones, pero para ello, debe cambiarse como en otro artículo se hace mención la forma de gobierno de la CCSS, donde los trabajadores la administren y defiendan del desmantelamiento, el lucro y la corrupción como el actual caso ocurrido con Marta Esquivel y la Junta directiva a la cabeza.

3. La clase trabajadora debe confiar solamente en sus métodos de lucha y sus formas de organización

La clase trabajadora no debe hacer eco de la defensa de la institucionalidad, como plantea el FA, los rectores, la CGR o el PLN, aplaudiendo el actuar de la fiscalía, ya que el poder judicial en incontables veces a reprimido al pueblo trabajador.

Un traidor y enemigo es Chaves efectivamente, pero de la clase trabajadora. Feinzag también es enemigo de la clase trabajadora, así como lo fue con el PUSC y lo es con el PLP actualmente, a como lo es la Asamblea Legislativa y Rodrigo Arias o como lo podría ser también un burócrata sindical.

Marta Esquivel hoy suspendida de su cargo, es también una enemiga de la clase y la mujer trabajadoras, que defiende los intereses de cooperativas y la UCCAEP, agente que defiende el desmantelamiento de la CCSS.

La institucionalidad burguesa que llaman a defender estos nefastos actores políticos es una institucionalidad enemiga de la clase trabajadora, porque legisla y defiende los intereses de la clase gobernante burguesa, bajo la figura de ministerios con políticas anti obreras, anti sindicales y siguiendo los mandatos de los organismos financieros internacionales.

La clase trabajadora no debe caer en la trampa de las pugnas interburguesas, de dimes y diretes que terminan por ejemplo acusando a Chaves de sedición. Feinzag y los demás partidos burgueses, no están por el pueblo trabajador como ya lo hemos mencionado anteriormente, ellos son los traidores y enemigos de la clase trabajadora.  La clase trabajadora efectivamente, deberá movilizarse, pero en defensa de la salud y la seguridad social, en asambleas de base democráticas, y tanto el gobierno como los partidos burgueses, son enemigos de la clase trabajadora y sus métodos. 


[1] https://socialismohoy.com/debate-como-defender-a-la-ccss-desde-la-clase-trabajadora/

[2] https://www.larepublica.net/noticia/a-rodrigo-chaves-debe-abrirsele-una-causa-por-el-delito-de-sediccion-afirma-eliecer-feinzaig

[3] https://delfino.cr/2022/01/fiscalia-inicia-investigacion-tras-denuncia-de-plan-para-perpetrar-golpe-de-estado-contra-alvarado-en-2020