Guácimo, 24 nov (SocialismoHoy.com) – Vecinos de la comunidad de Duacarí de Guácimo informaron que la finca bananera Calinda, propiedad del presidente de la Asamblea Legislativa, Antonio Álvarez Desanti, operó con normalidad hasta las 11 de mañana, en plena emergencia nacional por el huracán Otto.
“Se le dijo a los trabajadores que iban a sacar dos camiones y medio de fruta, pero al final solo se sacó uno y medio, porque a partir de las 11 ya la gente iba de vuelta a sus casas. Estaban muy asustados porque fue en la mañana cuando estaba peor el clima”, declaró a Socialismo Hoy una fuente anónima.
Cuentan que tanto los trabajadores de campo como de planta acudieron con normalidad a sus labores. El día anterior les dijeron que tenían que trabajar porque tanto hoy como mañana viernes había corta.
“El trabajo en una bananera es riesgoso porque es a campo abierto. El carrero tiene que echarse la fruta al hombro para montarla al cable, brincando zanjas y suelos muy quebradizos. Aunque anden grupos de empleados, no hay nada que hacer contra un huracán”, explicó otro vecino.
Si bien la empresa cuenta con equipo de primeros auxilios y equipo para atender emergencias, no se tomó ninguna medida especial de seguridad para proteger a las y los trabajadores ante un fenómeno de la magnitud de Otto.
Además, cuentan que en Duacarí tres, finca perteneciente a Bandeco, los trabajadores dejaron a un lado sus labores y retornaron a sus hogares por sus propios medios, ya que ni siquiera hubo servicio de autobús debido al huracán.
De igual manera varias fuentes confirmaron que en la Finca Támesis, también propiedad de Desanti, los trabajadores tuvieron que cumplir con su jornada hasta las diez de la mañana. A esa hora se suspendió el trabajo, debido a los fuertes vientos producto de la llegada del huracán a suelo costarricense.
La bananera Calinda forma parte del Grupo Calinda, un conglomerado de cinco fincas pertenecientes a “Álvarez & Marín Corporación”. En esta, el diputado y precandidato a la presidencia del PLN Álvarez Desanti funge como miembro de la junta directiva.
La plantación comenzó labores en 1992, en el cantón limonense de Guácimo, y en la actualidad cuenta con 346 hectáreas y emplea alrededor de 240 trabajadores, cuyas vidas quedaron expuestas hoy sin que el gobierno de Luis Guillermo Solís hiciera algo al respecto.
