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Carlos Alvarado impulsa plan de salvamento para “garroteras” y bancos privados

Imágenes con fines ilustrativos.

San José, nov (Socialismo Hoy) – Recientemente el presidente de la República firmó la Directriz N.º 059-H denominada “Creación del Programa de Crédito de Salvamento para personas sobreendeudadas”, como parte de una serie de medidas económicas que buscan según el gobierno brindar una serie de medidas de “auxilio” a los miles de personas trabajadoras que producto de la crisis no pueden pagar sus deudas, pero en el fondo oculta un plan de salvamento para los empresarios que tienen sus negocios en riesgo por esa situación.

A inicios de este mes el Semanario Universidad informó sobre la enorme cantidad de procesos judiciales de cobro, señalando que actualmente el Poder Judicial se encuentra saturado con 733.000 expedientes activos de cobro judicial, en su mayoría por tarjetas, electrodomésticos o préstamos rápidos, todos relacionados a consumo popular de las familias. Sólo de Instracredit serían casi 100 mil y 85 mil de las empresas de Gollo y Monge.

Datos del Banco Central muestran cómo el endeudamiento de los hogares en Costa Rica casi se duplicó entre 2012 y 2018, alcanzando la cifra de 14 billones de colones. Esas deudas por consumo de los sectores medios y populares son una consecuencia lógica ante los altos niveles de desempleo y sub-empleo, así como el estancamiento salarial de años, frente a los constantes aumentos en electricidad, combustibles, impuestos, alimentación vestido y otros.

Según el plan del gobierno, los beneficiarios de las medidas son personas cuyo nivel de endeudamiento supere, como proporción el 40% de sus ingresos, a plazos de 15 o 20 años y con tasas de bajas, pero a cargo de los Bancos del Estado.

En la práctica la preocupación del gobierno es salvar a los almacenes de electrodomésticos como Importadora Monge, prestamistas usureros como Instacredit y bancos privados, que ven como la incapacidad de pago de miles de trabajadores están poniendo en jaque a sus negocios. La política de Carlos Alvarado más que ayudar a las familias, es hacer un plan para salvar esos negocios privados a costas de destruir posiblemente la banca pública y permitirles seguir cobrando intereses excesivos y promociones engañosas.