San José, ene (Socialismo Hoy) – Conforme se acercan las elecciones hay un esfuerzo claro del empresariado del país por recomponer el viejo bipartidismo del PLN-PUSC o filtrar las “nuevas” alternativas hacia opciones lideradas por viejos actores de la política tradicional como el ex ministro de Figueres Juan Diego Castro. Somos claros en señalar que ninguna de estas fuerzas políticas representa una alternativa para la clase trabajadora y sin duda van a significar más ataques y empobrecimiento.
Hoy la principal fortaleza del PLN, PUSC y Castro es el fracaso del cambio anunciado por Luis Guillermo Solís y el PAC, un gobierno que como ya lo denunciábamos desde la segunda ronda en 2014 iba a significar la continuidad y profundización de los planes heredados del PLN (concesiones, ataques al salario y las convenciones colectivas, endeudamiento del país, alzas en las tarifas, recortes al presupuesto público, corrupción, etc), y por la tanto iba a sembrar la desilusión en los más de un millón de votantes que fueron a la urnas creyendo en el cambio que nunca llegó.
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Pero también esas fuerzas políticas se fortalecen por el descalabro e incoherencia del Frente Amplio que con nueve diputados terminó votando por represores como Celso Gamboa, por proyectos entreguistas como la Ruta 32 a manos chinas, manteniendo en sus filas a diputados cuestionados por violencia doméstica, siendo el principal punto de apoyo del gobierno en muchos temas como la entrega del nuevo puerto en Limón a APM Terminales o la aprobación de la Reforma Procesal Laboral; un partido que puso todas sus esfuerzos en estos cuatro años en acuerdos por arriba en el parlamento pero abandonó las luchas por abajo y llevó a enterrar reivindicaciones como la Ley de Territorios Costeros o aprobar la peor versión de la Ley de Aguas.
Frente a estas alternativas empresariales, a los partidos fundamentalistas religiosos y al falso progresismo del PAC-Frente Amplio hemos presentado en estas elecciones la candidatura Presidencial del Partido de los Trabajadores liderada por Jhonn Vega y candidaturas a diputación en todas las provincias. Para nosotros, presentarnos a elecciones es la oportunidad de levantar la voz de los trabajadores en un proceso electoral antidemocrático y presentar una alternativa para el gobierno de los trabajadores que acabe con la pobreza y el desempleo.
Nuestro éxito en la campaña va más allá de los votos obtenidos, nuestro objetivo prioritario como lo hemos dicho a lo largo de la campaña es fortalecer la organización y la lucha de los trabajadores que hoy viven bajo una dictadura empresarial en la empresa privada. Les pedimos votar por la única alternativa socialista y de la clase trabajadora, una opción que no le vende falsas ilusiones a la gente y que le llama a confiar solo en sus propias fuerzas para hacer avanzar las luchas de los trabajadores, pero especialmente les pedimos que se organicen junto a nosotros pasadas las elecciones para hacer frente a los ataques que vendrán de uno u otro partido.
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Nuestra campaña y apariciones públicas en los pocos debates y espacios en medios que se nos abren han generado grandes simpatías en las filas de los trabajadores y la militancia de izquierda en el país, lo cual nos complace. Hemos demostrado ser una opción coherente y firme en sus principios, que defiende un programa opuesto a los grandes intereses empresariales que hoy nos tienen sumidos en la pobreza y el desempleo, a todos ustedes que simpatizan con nosotros les decimos que el único voto útil es el que fortalece la lucha de los trabajadores y ese voto es sin duda por todas las candidaturas del PT.
Cada uno de los votos al PT serán un impulso muy importante para la lucha que venimos dando por construir sindicatos en las piñeras y fábricas, vamos a honrar esa confianza redoblando nuestra militancia abnegada, acompañando e impulsando las luchas y construyendo un partido socialista que defienda un gobierno de los trabajadores.
