En estos primeros 100 días del gobierno, el PAC-FA ha intentado venderse como el defensor de los derechos humanos. Sin embargo, dicha postura es solo una pose para disimular sus ataques al pueblo y retardar el avance de las luchas de los sectores oprimidos en el país.
Hoy que el gobierno puja por aprobar el IVA y una serie de reformas antipopulares contra los trabajadores es fundamental su principal engaño.
La primera prueba de esto es su política frente a la lucha por el matrimonio igualitario y la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que ordena su cumplimiento en Costa Rica.
En el contexto de la disputa electoral con Restauración Nacional y su discurso homofóbico, dicha resolución le generó gran apoyo al PAC como defensor de los derechos humanos.
Sin embargo, durante estos primeros 3 meses de gobierno su política fue renegar de su responsabilidad con el tema, al permitir que los miembros del gobierno en el Consejo Superior Notarial votaran prohibirles a notarios del país efectuar dichos matrimonios.
Recientemente la Sala IV resolvió dar un plazo de 18 meses a la Asamblea Legislativa para la derogación de las leyes que prohíben el matrimonio entre personas del mismo sexo, ante lo cual Alvarado decidió convocar el proyecto de “Ley de Unión Civil para parejas del mismo sexo”, que otorga menos derechos a las parejas homosexuales en comparación con el matrimonio de los heterosexuales.
La segunda prueba de hipocresía la muestran el presidente Alvarado y Patricia Mora, ministra de la Condición de la Mujer a cargo del INAMU, en relación con la ola de violencia contra las mujeres que padece el país y la indefinición respecto al decreto necesario para la aplicación del aborto terapéutico.
Luego de meses de espera el gobierno se negó a declarar un verdadero decreto de “emergencia nacional” por los femicidios que podría haber otorgado mucho más presupuesto que hoy se destina al pago de la deuda, y en su lugar lanzó un decreto de “prioridad nacional”. Dicho decreto no da ninguna salida real de empleo, vivienda ni mayor inversión en albergues para que las mujeres trabajadoras puedan lograr independencia económica.
Hoy el gobierno PAC-FA sigue sin decretar la norma técnica necesaria para la aplicación del aborto terapéutico y condena a mujeres y adolescentes a seguir muriendo o arriesgando su vida durante el embarazo. Ante los cuestionamientos, el gobierno aduce que su prioridad el atender el déficit fiscal y temas como este no deben “distraer” la atención.
El Frente Amplio es igual de responsable al participar de un gobierno prioriza la aprobación de iniciativas antipopulares para seguir pagando la deuda pública y mantener los privilegios de las empresas, pero no le interesa impulsar medidas urgentes en favor de la vida de las mujeres.
Finalmente, otro de los ejemplos del engaño pro derechos humanos es la falsa oposición del gobierno a la dictadura de Ortega. Mientras la representación de Costa Rica plantea vacías condenas a Nicaragua en la OEA y llama al acercamiento entre este y la oposición, el gobierno mantiene las relaciones comerciales con el vecino país y le sigue brindando oxígeno a la dictadura.
Por otro lado, su política frente a los refugiados nicaragüenses es reforzar la vigilancia en la frontera para rechazarlos, continuar con los operativos de migración y ampliar los centros de detención para detener y expulsar a los que ya se encuentran aquí. Cabe destacar que hasta hoy sigue sin proveer de empleos, atención en salud y alimento a las víctimas de dicha dictadura y rechaza la mayoría de las solicitudes de refugio.
Tal es el engaño del PAC FA que utiliza el escudo de “los derechos humanos” para ganar popularidad y aplicar medidas contra el pueblo como el IVA y los recortes presupuestarios. Como clase trabajadora es necesario que nos unamos para luchar contra todos los ataques de este gobierno y para hacer avanzar de verdad todas las luchas de derechos humanos que hoy se encuentran sobre la mesa en nuestro país.