- En 2017, la deuda pública alcanzó los 15 billones de colones, casi 23 mil millones de colones, y consume una tercera parte del presupuesto del país.
San José, nov (SocialismoHoy.com) – Los trabajadores escuchamos todos los días a los políticos lamentándose por la difícil situación económica del país. Nos dicen que el país no tiene plata, que por culpa del déficit fiscal tenemos que “socarnos la faja”, es decir, aguantar los aumentos en el precio de los alimentos, de los pasajes del bus o el congelamiento de los salarios.
Para nosotros la culpa del déficit no la tenemos los trabajadores como siempre nos hacen creer. En lugar de invertir dinero en mejorar la calidad de la salud y la educación, para tener pensiones u obra pública que resuelvan las necesidades de la población, prefieren gastar nuestro dinero en el pago de la deuda.
¿Qué es y de dónde viene la deuda pública?
Se entiende por deuda pública al conjunto de deudas que mantiene un Estado frente a organismos o instituciones tanto dentro como fuera del país. Se divide en dos: deuda interna y deuda externa.
Esta nace cuando los gobiernos del PLN y PUSC pidieron prestado a organismos financieros internacionales: Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, entre otras instituciones del imperialismo gringo. Esos gobiernos nos endulzaron el oído diciendo que los préstamos eran necesarios impulsar el desarrollo del país. Lo que no dijeron es que por esos préstamos el país iba a quedar endeudado, ni que seríamos los trabajadores los que al final pagaríamos esa deuda.
¿Cómo afecta la deuda las condiciones de vida del pueblo trabajador?
Primero que todo, para no fallarle a los imperialistas, los gobiernos tienen que subir los impuestos, hacer recortes en la salud, educación y programas sociales e incluso subir las tasas de interés de los préstamos bancarios. O sea, el pueblo es el que termina pagando los platos rotos por las decisiones de los políticos amigos de los empresarios.
Otro efecto ha sido la privatización y venta de instituciones estatales. La privatización de la banca, de los puertos de Caldera, la venta de FERTICA, CEMPASA, FANAL y la llegada masiva de empresas como INTEL o la terrible expansión piñera son algunas consecuencias de los préstamos y el pago de la deuda.
Las transnacionales de la piña, el banano, las fábricas ubicadas en zona franca pagan bajísimos salarios, no permiten a los trabajadores formar sindicatos para defender sus derechos y saquean los recursos naturales.
¿Qué beneficios trajeron estos préstamos? Ninguno. El país adquirió una deuda inmensa que la tiene que pagar el pueblo y lejos de convertirnos en un país de “primer mundo” nos hemos vuelto más dependientes y sumisos a las políticas del imperialismo.
Los gobiernos son cómplices del endeudamiento del país
En 2017, la deuda pública alcanzó los 15 billones de colones, casi 23 mil millones de colones. Esto quiere decir que los gobiernos han sido los principales responsables del endeudamiento del país.
Con el gobierno del PAC, sectores del pueblo pensaron que iba a haber un cambio, pero no fue así. Se mantuvieron las mismas políticas y nunca ha dejado de pagar la deuda pública.
No pago de la deuda, auditoría interna para saber cuánto robaron los corruptos
El gobierno gasta una tercera parte de su presupuesto pagando la deuda pública, una deuda que sale del bolsillo de los trabajadores mientras los banqueros y los empresarios siguen enriqueciéndose. Una deuda que se ha convertido en el principal instrumento de dominación de Costa Rica por los bancos y países imperialistas.
Como Partido de los Trabajadores creemos que se debe suspender inmediatamente el pago de esta deuda, y hacer una auditoría para saber cuánto se han robado en negocios corruptos como “El cementazo” o “La Trocha”; además para saber cuánto se ha malgastado, y cuánto ya se pagó.
Este dinero se debe invertir en las necesidades de los trabajadores como EBAIS, Hospitales, escuelas, colegios, parques, cultura e infraestructura vial.
