El 8 de Mayo los colectivos “Yo si quiero un estado laico” y “Ni una menos” convocaron a protestar el 8 de Mayo, durante el traspaso presidencial. El Partido de los Trabajadores se sumó a esta protesta, asumiendo las demandas de las organizaciones convocantes: la necesidad de un Estado Laico y la petición de la declaración de estado de Emergencia Nacional por la ola de femicidios, además de estas peticiones sumamos nuestras propias demandas: El rechazo al “combo” fiscal y el apoyo y la solidaridad a los pueblos centroamericanos que luchan contra las tiranías de Juan Orlando Hernández y Daniel Ortega.
La marcha fue acordonada con varias filas de oficiales de la Fuerza Pública y del Grupo Especial de Operaciones. Se nos impidió el paso, más allá de las restricciones previamente anunciadas. Pese a que acordamos varias veces con el oficial Erick Calderón, responsable del operativo, la ruta que íbamos a seguir, se nos cortó permanentemente el paso, no se nos permitió pasar más allá de la esquina este de la Asamblea Legislativa y se nos impidió confluir con otro grupo de compañeros y compañeras que en el Parque Central protestaban contra las delegaciones diplomáticas de las tiranías nicaragüense y hondureña.
Estos son los hechos.
Que el Partido de los Trabajadores participara en la protesta y denunciara el operativo policial ha generado todo tipo de reacciones, agradecemos las reacciones de apoyo al partido, no obstante han existido muchas reacciones adversas o por lo menos dudas de si era justificada nuestra acción, pasamos a responder las objeciones.
Defendamos el derecho a manifestarnos libremente.
Varias objeciones se realizaban en el sentido que la policía y el gobierno estaban en su derecho a impedirnos el derecho a desplazarnos por las calles de la capital en una protesta. Creemos que eso es falso. Un acto protocolario, así sea el cambio de mando presidencial, no suspende el derecho de libre movimiento y libre tránsito de las personas, así como tampoco suprime el derecho a la libertad de opinión, expresión y protesta que están constitucionalmente garantizados.
Durante el acto de cambio de gobierno fue obvio que se usó el derecho a la libre expresión, por ejemplo algunos asistentes llevaron la bandera azul y rosa del movimiento trans, estaban en todo su derecho. Pero, el derecho a la libertad de tránsito, opinión, expresión y protesta, no exige que se esté de acuerdo con el gobierno, justamente en eso consiste la diferencia entre una tiranía y un país donde se respetan las mínimas libertades democráticas. Nosotros como es público y notorio estamos en contra del gobierno. ¿Tenemos o no tenemos derecho a manifestarnos, opinar y desplazarnos libremente? ¿Podemos ejercer esos derechos el 8 de Mayo en medio del traspaso de poderes? La respuesta correcta es SI, si podemos y justamente por ello intentamos ejercer estos derechos.
Que este punto sea punto de debate, solo habla de cuánto ha avanzado la cultura autoritaria y antidemocrática bajo el gobierno del Partido Acción Ciudadana.
“No se podían dejar pasar porque había que guardar la seguridad de las delegaciones internacionales”
No creemos que la seguridad de los presidentes de otras naciones, suprima el derecho de opinión, manifestación y libre tránsito. Las visitas de Kennedy, Reagan, Clinton y Obama presidentes de los Estados Unidos, tuvieron sus respectivas protestas cuando visitaron al país. En el caso de Reagan inclusive un careo a gritos con el entonces diputado Sergio Erick Ardón.
Igualmente en el año 2001 se realizó la reunión de la OEA en Costa Rica, con múltiples mandatarios de Latinoamérica, la protesta llegó hasta la boca del Teatro Nacional, donde se realizaba el evento.
El diario La Nación del 9 de Mayo de 2018 informa: “El mandatario boliviano (…) adelantó (…) su salida de Costa Rica (…) luego que un tumulto de personas le impidieron ingresar al Teatro Nacional”. Como se puede ver la Fuerza Pública estaba más preocupada en evitar el movimiento de una marcha pacífica, que en efectivamente cuidar y escoltar a los presidentes.
Las manifestaciones pueden surgir en todo momento.
Otro grupo de objeciones podrían ser resumidas en la idea, que nuestra protesta fue inoportuna y que “molestaba” la solemnidad del acto, que era “una fiesta democrática” y que ya tendríamos tiempo de protestar después.
Creemos que esto también es falso. Si el derecho a protestar y manifestarse solo se puede ejercer cuando las autoridades y la “opinión pública” consideran prudente (es decir cuando La Nación S.A., Teletica y Repretel considera prudente), pues entonces no existe realmente el derecho a protestar. A las autoridades, cuales quiera que sean siempre les parece “improcedente” o “fuera de lugar” cuando se protesta contra ellas.
Los momentos serios y solemnes también pueden ser momentos de protesta.
Otras objeciones a la protesta, están centradas en que es irrespetuoso manifestarse durante actos solemnes o que tienen un gran significado para las personas.
Nosotros nunca queremos ser irrespetuosos y nos cuidamos mucho de respetar los momentos solemnes y serios para la gente. Ahora, momentos solemnes y serios se pueden transformar en momentos de protesta enérgica, el entierro de Berta Cáceres en Honduras en el año 2016 fue muy solemne, y sin embargo fue un enérgico acto de protesta contra la tiranía de Juan Orlando Hernández, sin que eso irrespetara el dolor y el luto de la familia Zuniga Cáceres y de quienes quisimos a Berta Cáceres.
En el año 2001 fue asesinado el periodista Parmenio Medina, su despedida tuvo múltiples manifestaciones espontaneas de repudio al intento de acallar al periodismo independiente, su entierro también fue una protesta, sin irrespetar el luto de sus familiares.
No obstante, el cambio de gobierno, no es la despedida de un luchador o luchadora muerto por la cauda de la justicia y la libertad, es el cambio de un gobernante a otro, hay muchas razones y muchos ejemplos históricos, hoy recordados como momentos importantes de la vida democrática, donde se protesta contra el gobierno y sus invitados.
De hecho hubo protestas ciudadanas cuando asumió Miguel Ángel Rodríguez en 1998, cuando asumió Oscar Arias en 2006 (en ese caso fue muy numerosa), también con Laura Chinchilla en el 2010. Así que en realidad en los últimos 20 años lo normal, es que se organicen protestas contra el gobierno desde el primer día.
Defender la democracia, es luchar contra JOH y Ortega.
Hay otro elemento importante, que tiene que ver con la falsedad de la idea de la “fiesta democrática”. En el acto mismo estaban los representantes gubernamentales de dos connotadas tiranías centroamericanas: la nicaragüense y la hondureña.
Nuestro partido ha estado presente y solidario en las luchas de los pueblos centroamericanos contra las tiranías y nos sentimos muy orgullosos de ello. El gobierno de Carlos Alvarado está dando estatus de “gobierno amigo” a los representantes de dos tiranías que masacran diariamente a su pueblo, que también es el nuestro. ¿No es ya esto suficiente motivo de protesta?
La protesta contra los tiranos está presente en lo más profundo de las tradiciones nacionales (que en teoría todos defendemos, incluyendo Carlos Alvarado). ¿No sabemos todos que el Paseo de los Estudiantes se llama así por la protesta que encabezó Carmen Lyra y Luisa Gonzales, junto a las estudiantes del Colegio de Señorita y del Liceo de Costa Rica contra la dictadura de los Tinoco? ¿No fue la protesta de Joaquín García Monge contra los tiranos de Italia y Perú, lo que le costó su puesto en la función pública y una de las razones por lo que lo consideramos un ejemplo de intelectual comprometido? ¿No fue acaso clave la solidaridad del pueblo de Costa Rica para ayudar a caer la tiranía de Somoza? ¿No ha sido siempre Costa Rica un lugar donde los perseguidos políticos pueden encontrar un lugar de refugio contra los tiranos?
Si nos sentimos orgullos de estos hechos históricos. ¿Por qué no nos produce repudio que Carlos Alvarado se fotografía y se abrace con los representantes de las tiranías hondureñas y nicaragüenses? Para los miles de jóvenes que hoy combaten contra las turbas de la JS-19 y la policía nacional una foto de Carlos Alvarado con Moisés Halleslevens, es lo mismo que una foto de Carlos Alvarado con Anastasio Somoza.
Muchas razones para protestar contra el gobierno desde el primer día.
Pues creemos que hay muchas razones desde ya para protestar contra el gobierno. De hecho el movimiento sindical, de mujeres y ecologista tenía muchas razones para hacerse presente ayer en la protesta y creemos que cometió un serio error no llamando a protestar contra Carlos Alvarado desde el día uno.
Como se ha mostrado en las declaraciones de la UCCAEP y la ACHCAM, los empresarios están más que optimista con Carlos Alvarado, el equipo económico del gobierno está compuesto por súper ricos como André Garnier y por lo más graneado delos tecnócratas neoliberales como Edna Camacho, Rocío Aguilar, Dyala Jiménez Figueres y Amparo Pacheco. En política económica es el gabinete más conservador en décadas.
Así mismo, el gobierno tiene notables defensores del agronegocio, el ecocidio y la entrega de la naturaleza a intereses privados como Renato Alvarado, Moises Mug Villanueva y Yamileth Astorga.
El compromiso histórico de Carlos Alvarado con Rodolfo Piza, hombre clave del conservadurismo católico, está asentado en una sola idea: que no avancen los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Hay un compromiso que no se avance ni siquiera en materia de aborto terapéutico y parto humanizado. El nombramiento de Patricia Mora en el INAMU, lo único que hace es maquillar a este gobierno de unidad neoliberal y conservadora.
La política de Carlos Alvarado es clara: Tolerar a las tiranías del área, cobrarle impuestos al pueblo, destruir los derechos laborales, proteger los intereses de los grandes grupos empresariales del agronegocio, el turismo, el desarrollo inmobiliario, el “capitalismo verde” etc. , no avanzar una coma en los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Esa es su agenda y no otra. Creemos que son razones más que de sobra para protestar contra este nuevo gobierno.
Esperamos que más compañeros y compañeros se sumen a esta justa lucha contra el gobierno. Por eso desde el Partido de los Trabajadores invitamos a las organizaciones sociales, activistas, sindicatos, mujeres, ambientalistas, juventud a que sigamos organizando y luchando contra los ataques del gobierno.