Este 20 de junio se desarrolló la marcha más numerosa en lo que va del gobierno de Rodrigo Chaves. Decenas de miles de personas se manifestaron en medio de las negociaciones del Fondo Especial para la Educación (FEES) que financia a las universidades públicas y en un contexto de severa crisis educativa marcado por el presupuesto más bajo en más de una década.
Además de las universidades hubo una amplia participación de personas del MEP, quienes se sumaron pese a la camisa de fuerza impuesta por la ley anti huelgas aprobada en el gobierno de Carlos Alvarado en alianza con el PLN.
Desde el PT apoyamos la manifestación y la exigencia del cumplimiento inmediato del 8% para la educación, nuestra militancia en las universidades y el magisterio respaldo las acciones de lucha. Celebramos que sectores se pongan en marcha contra las políticas sostenidas por el gobierno de Chaves.
No obstante, la marcha evidenció también una gran cantidad de contradicciones.
Por un lado, el Consejo Nacional de Rectores (CONARE) ya en varias ocasiones ha traicionado la lucha por el presupuesto, firmando acuerdos a espaldas de la comunidad universitaria. Una de las traiciones más grandes fue aceptar que el presupuesto de las universidades se negocie cada año y no de manera quinquenal como establece la Constitución, curiosamente ya nadie habla de eso.
También vimos a las diputaciones del PLN solidarizarse con la marcha de manera hipócrita, pese a que ese partido fue el principal impulsor de la ley que limita las huelgas. También les escuchamos hablar al final de la misma, cuando han sido este partido un por años enemigos de la educación pública.
El Frente Amplio (FA) por su lado se sumó al “Pacto Nacional por la Educación Pública” junto al PLN y CONARE. El FA se esfuerza por ser la “pata izquierda” que sostenga al PLN; lejos de llamar a fortalecer un polo de resistencia de la clase trabajadora intentan sembrar esperanzas en acuerdos con estos partidos enemigos de las luchas populares.
A diferencia del FA opinamos que se requiere de una política independiente de estos partidos, que sea capaz de levantar un polo de resistencia organizado independiente.
El 20 demostró que hay voluntad de salir a luchar. Pero para poder triunfar se requiere rebasar las direcciones sindicales mayoritarias y mantener una política independiente del CONARE y los partidos del gran empresariado como el PLN.
Hace falta también un programa de lucha que enfrente la deuda interna y externa que hoy consume el presupuesto nacional. El principal argumento de Chaves para no pagar el 1% adeudado a las universidades (5.5 mil millones de colones) son los altos intereses de la deuda y de eso no escuchamos ninguna denuncia.
¡Cumplimiento inmediato del 8% del PIB para la educación!
¡Auditoria de la deuda y suspensión de pagos para financiar la crisis en la educación!
¡Derogatoria de la ley anti huelgas para fortalecer la lucha!
¡Derogatoria de la regla fiscal que limita la inversión pública para seguir pagando la deuda!
