Los Chiles, 5 de Oct (Socialismohoy.com) – La semana pasada los habitantes de Coquital, San Pablo, Medio Queso y Las Nubes recibieron la noticia que Ticofrut volverá a aplicar agroquímicos mediante avioneta. La empresa inició la fumigación desde el miércoles de la semana pasada, bombardeando con químicos a las comunidades cercanas a la frontera.
Este método se aplica pues «sale más barato a la empresa», pero tiene un enorme costo para las comunidades y el ambiente. Toneladas de agroquímicos no terminan en las plantaciones, sino sobre la comida, el agua y las habitaciones de las personas.
La aplicación de agroquímicos de esta manera, es un grave atentado contra la salud de las personas en estas comunidades y se suma a la grave situación de contaminación de la zona. Desde el Partido de los Trabajadores (PT) queremos denunciar esta situación y le exigimos a las autoridades de Salud y del Ministerio de Trabajo que se presenten en la zona y exijan el cese de estas acciones por parte de la empresa.
La situación de los agroquímicos en la zona norte es crítica
Las plantaciones piñeras y naranjeras causan enormes problemas al medio ambiente y a las comunidades cercanas a sus actividades. En la zona norte, al uso indiscriminado de agroquímicos se le ha sumado la deforestación (incluso de áreas protegidas), el envenenamiento del agua y el desgaste del suelo.
Esto produce enormes problemas entre los trabajadores de estas plantaciones y a estas comunidades, a quienes les causa problemas renales, de piel, intoxicaciones, e incluso cáncer. No es casualidad que estas comunidades experimenten los índices más altos de estas condiciones y de enfermedades congénitas en todo el país.
Con la utilización de «bombardeo aéreo» de agroquímicos estas sustancias van a llegar en mayor medida directamente a la comida y el agua de las miles de personas que viven alrededor de la zona.
Urge que se regule el uso de los agroquímicos y que se cobre el daño a estas empresas
El uso indiscriminado de estas substancias hoy no tiene prácticamente regulación. De hecho, muchos químicos que son prohibidos en otros países por sus efectos se usan con toda naturalidad en Costa Rica. De hecho, somos el país que más consume agroquímicos en el mundo por persona. Igualmente no se toman medidas básicas para evitar que estas substancias terminen en el agua, o causen daño a los trabajadores de estas plantaciones.
Desde el PT exigimos a las autoridades de salud, al presidente Luis Guillermo Solís y a las autoridades del Ministerio de Trabajo que se hagan presentes en la zona a atender esta denuncia y que exijan el cese de estas acciones a las empresas.
Finalmente, creemos que también urge un estudio a profundidad sobre los efectos de los agroquímicos sobre estas comunidades y sobre la forma en que las empresas piñeras y naranjeras los están utilizando. El estado debe exigir a estas empresas que indemnicen a toda persona afectada por sus actividades, y a que cesen cualquier uso de sustancia que dañen la salud de los trabajadores, el agua, o el ambiente.
Debemos seguir el ejemplo de quienes han luchado contra el nemagón (y a quienes hoy el gobierno persigue). Nuestra organización se pone en función de esta lucha y reafirma su compromiso con las comunidades de la zona norte, contra los abusos de estas empresas.
Anteriormente, las comunidades organizadas lograron frenar las fumigaciones aéreas, y hoy estas empresas quieren volver a esta práctica. Únicamente si las comunidades de esta zona se organizan contra este atropello vamos a poder frenar estos bombardeos de químicos, y frenar los abusos que estas empresas cometen contra el ambiente, los trabajadores y estas comunidades.
