Upala, 27 abril de 2020 (SocialismoHoy.com) – Un grupo de trabajadoras y trabajadores que participan en la cosecha de naranjas en la finca de la empresa Del Oro en Birmania de Upala, denuncian irregularidades con el cumplimiento de derechos laborales.
Según la denuncia recibida por este medio, la empresa habría contratado a las personas por un salario de 60 mil colones semanales, pero una vez iniciado el proceso de la cosecha, les modificaron el salario fijo que tenían a uno por destajo, definiendo un pago de 4 mil colones por cada saca de naranja cosechada, lo cual significó que muchas personas trabajadoras puedan ganarse máximo 8 mil colones diarios.
La mano de obra para la cosecha estaría a cargo de la subcontratista “Proyecto Eólico Catapa S.A”, pero todo el proceso es dirigido por la empresa Del Oro S.A la cuales es dueña de las naranjas y quien las procesa para el mercado internacional.
En la platación participan unas 170 personas y debido al cierre de fronteras por la emergencia nacional, la mayoría eran costarricenses y residentes , pero después del cambio en el salario muchas personas alegaron el pago de salario mínimo y la empresa les despidió.
Posterior a esos los despidos, la empresa habría contratado unas 100 personas nicaragüenses, a las cuales les pagaría mucho menos a que a los costarricenses que siguen en la plantación, ya que la saca de naranja para los costarricenses se habría definido en ¢4000 colones y para los nicaragüenses en ¢2500 solamente.
Otro de los problemas que tienen las personas trabajadoras, es que la empresa colocó unos autobuses para que les traslado del centro de Upala hasta la plantación, pero en el trayecto de más de una hora, la capacidad de las unidades sobrepasa las disposiciones del Ministerio de Salud para el transporte de personas en medio de la pandemia del Coronavirus SARS-CoV-2.
Según su página web www.delorocr.com, Del Oro es una empresa dedicada a la producción de jugo de naranja y piña pasteurizado y concentrado que exporta a mercados como Estados Unidos, la Unión Europea, Japón, Belice y el Caribe, así como el mercado interno de Costa Rica.
