Alejandro Cedeño- PT Costa Rica
Margarita es una estudiante de un colegio nocturno en Tibás. Ella llamó argumentando que no podía presentarse a prueba parcial porque no había tenido agua en todo el día, y efectivamente, en el colegio, tampoco había agua. El problema ido empeorando, hoy más que nunca el acceso al agua potable y el derecho a la educación de calidad están relacionados: son víctimas del ataque de un sistema capitalista, donde la clase trabajadora es la más afectada. Vamos a describir el por qué.
El contexto de la problemática: el acceso al agua potable y el capitalismo
Margarita es trabajadora en el sector privado. En este caso, presentamos dos tipos de opresiones: uno, el tema de ser mujer trabajadora, dos, el tema de trabajar en el sector privado. La mujer trabajadora presenta peores condiciones laborales, los salarios más bajos, así como otros problemas relacionados con un Estado machista y un gobierno brutalmente machista. Y el sector privado, pues que la sindicalización es casi nula desde 1948, por ende, se habla de una dictadura.
Esta situación se recrudece con el tema del agua: la crisis de acceso del líquido vital tiene a la clase trabajadora, en una cuestión de vida o muerte. Tibás, Alajuelita, Hatillo, Goicoechea, son algunos casos por citar. No hay interés del Estado, ni del gobierno y sus instituciones, por resolverles, ¿por qué? porque defienden un régimen en beneficio del empresariado, o pregúntese, ¿a los grandes condominios?, ¿a las grandes hoteleras les falta el agua?
Por ende, no basta para Margarita, ser mujer explotada en su trabajo, sino que además, no tiene el agua para solventar las necesidades más básicas para ella y su familia, y claro que ello afecta en la educación.
El AyA si fuera una institución en favor de la clase trabajadora, pondría los intereses de estas familias de primero y solucionaría el problema, bajando las tarifas, y no otorgando permisos a grandes hoteleras y cámaras empresariales, que pagan tarifas sumamente bajas y a las cuales nunca les falta el agua, o denunciaría a la Florida Company por aprovecharse descaradamente de la situación. Así funcionan las instituciones en un régimen como el nuestro, éstas defienden el interés de los grandes empresarios, en contubernio con el gobierno y el Estado.
Esto es el capitalismo, destruye las conquistas de la clase trabajadora, como lo es el agua potable. La ley de aguas de 1942 y posteriormente, la ley general de agua potable de 1953, fue producto de luchas comunales, luchas que hoy en día se dan en las comunidades, pero también fuera de la GAM, como lo es el caso del agua en Sardinal: a la agroindustria, a las grandes hoteleras, a los condominios, explotan sin restricción mantos acuíferos.
¿Educación y la problemática del agua, qué relación tienen?
El colegio no tiene agua, en Tibás no hay agua como se hizo mención. No puede brindar un servicio decente, es inhumano, así funciona el capitalismo y una educación mercantilista. Al modelo actual educativo mercantilista que promueve la OCDE, solo le importa, que, aunque Margarita no tenga agua, venga y realice la prueba.
Esto empeora la crisis en Educación. Actualmente, educación tiene el presupuesto más bajo de los casi últimos 30 años, no llega ni al 5,5% del PIB. Las instituciones educativas se caen a pedazos, no hay plata para becas, hay cierre de programas, hay congelamiento de plazas, los salarios se adeudan, así como otros rubros. Pero al capitalismo no le importa, bajo este modelo, hay que presentarse a trabajar sí o sí, a aplicarle la prueba a Margarita, porque en el capitalismo con “rostro humano”, estos problemas son propios de la realidad y todo se mejorará en el marco de confiar en las instituciones. ¡Es la barbarie!
¿Y dónde entra la unidad del sector público y privado para enfrentar estas situaciones?
Estudiantado a nivel nacional se han lanzado a las calles, protestando por el deterioro de sus condiciones. Miles de trabajadoras y trabajadores de la educación se han lanzado a las calles en el Gobierno de Chaves y de la ministra Müller por los ataques del Gobierno a sus condiciones salariales y laborales. Miles de vecinos, se han movilizado y han sido reprimidos, por exigir acceso a agua potable. Al trabajador de la educación le afecta el salario y el tema del agua, así como a Margarita, le afecta el agua, su condición salarial y el no tener las condiciones aptas para el estudio.
Hace pocos días, hubo una movilización en defensa de la seguridad social, donde sectores sindicales del Magisterio Nacional, se solidarizaron. Ello es importantísimo, pero ante la magnitud de la crisis, es insuficiente. Hoy en día, vemos que estos diversos ataques a la clase trabajadora tienen en común algo, les afecta como clase, a la burguesía, a los ricos, esto no les afecta, es a la trabajadora como Margarita, que le afecta el tema del agua, que no puede estudiar, que tiene un pésimo salario, que además sus hijas e hijos no pueden tener condiciones óptimas de estudio.
Construyamos una agenda y unifiquemos las luchas
Las grandes conquistas de la clase trabajadora como educación pública de calidad, como el tema del agua, bajo el capitalismo están amenazadas, ello como se hizo mención, obedecen a un tema de desfinanciamiento, hay un brutal recorte en educación y un problema en inversión, para garantizar el acceso al agua potable. Primero garantizan los servicios a los grandes empresarios de estos sectores, y si sobra, para la clase trabajadora, migajas, así funciona el capitalismo.
El AyA debe pasar a control de la clase trabajadora, no tiene que ser más una institución al servicio de intereses mezquinos del gran empresariado que este gobierno defiende, ¿cómo ha defendido? Pues, haciendo cortes, además de reprimiendo a los que luchan y garantizando el servicio sin problema alguno, a los grandes sectores ya mencionados. El AyA debe cambiar su conformación, y en el seno de la Junta Directiva, que hayan organizaciones sindicales, comunidades y gobierno. Así con Educación, debemos articular las luchas de las y los trabajadores de la educación, con las y los estudiantes y comunidades amenazadas, porque se garantice al menos el 8% del PIB, bajo una educación pública, gratuita y laica.
Pero para, ello desde el Partido de la Clase trabajadora, lanzamos la consigna de la unidad del sector público y privado. Desde nuestro partido hacemos este llamado, para que el sector sindical público, tienda una mano al sector privado, que el y la trabajadora de la educación, que también le afecta el tema del agua, se unan, y construyan una agenda de lucha, en su barrio y en su trabajo. Sólo así se puede enfrentar la crisis, construyendo un campo revolucionario, no como el campo y la salida que plantea por ejemplo el Frente Amplio y el reformismo, confiando en instituciones como la Sala IV o la defensoría de los habitantes o la Asamblea Legislativa, que ya otras veces han legislado en contra de la clase trabajadora, como por ejemplo la Sala IV y la Ley Antihuelgas.
¡Por acceso a agua potable para las comunidades y familias trabajadoras!
¡Por un AYA bajo control de la clase trabajadora, no más un AyA al servicio del empresariado!
¡Por 8% del PIB para educación pública de calidad!
¡Unidad del sector público y privado para enfrentar estos ataques!