La huelga nacional contra el plan fiscal demostró una enorme fuerza. Cientos de miles de personas en el país se movilizaron y tomaron acciones contra este paquetazo.
Sin embargo uno de los principales obstáculos para que esta lucha avanzara es la existencia de una burocracia sindical en los principales sindicatos del país.
¿Qué es la burocracia sindical?
En nuestro país la dirigencia dentro de los sindicatos tiene privilegios derivados de sus puestos. Un dirigente sindical puede ganar en ocasiones 2.5 veces el sueldo que tenía en su puesto.
Gracias a esto se ha formado una camada de dirigentes que defienden sus intereses por encima de los de la clase trabajadora.
Esto lleva a estos dirigentes no solo a defender sus puestos a capa y espada, sino a defender también una forma de sindicalismo “conciliador” .
Esto no significa que esta burocracia no pueda dirigir en ocasiones luchas. Para mantener sus puestos deben mantener la apariencia de luchar ante las bases, pero el proyecto de sindicalismo que defienden está lejos de ser lo que la clase trabajadora necesita para avanzar en la defensa de sus intereses.
¿En qué forma nos quita fuerza la burocracia sindical?
En primer lugar la burocracia defiende sus intereses impulsando un modelo antidemocrático dentro de los sindicatos. Por ejemplo Albino Vargas promovió una reforma de los estatutos que le quitó el poder de decisión a las seccionales, y ha hecho enormes maniobras antidemocráticas para reelegirse.
En segundo lugar al defender un “sindicalismo conciliador” terminan sin llevar a fondo las luchas, y no enfrentan al estado y las patronales con toda la fuerza de la movilización. En caso del Plan Fiscal esperaron más de 2 años para impulsar una huelga y no han llevado a fondo el método de bloqueos a nivel nacional para derrotar el proyecto.
En tercer lugar dividen la clase trabajadora al no luchar a fondo contra la dictadura del sector privado que no permite que el 80% de la clase trabajadora tenga sus organizaciones, única forma de defender los derechos y luchar por la mejora de nuestras condiciones.
Solamente luchando contra la burocracia sindical la clase podrá comenzar a derrotar los ataques contra nuestros derechos y comenzar a cosechar victorias.
