El pasado 10 de julio el gobierno de Carlos Alvarado (PAC) en conjunto con el Consejo Nacional de Rectores (CONARE) donde participan los rectores de las cinco universidades públicas, junto al presidente de la Federación de Estudiantes de la UNA (FEUNA), negociaron un recorte de alrededor de 48 000 millones de colones para el presupuesto universitario correspondiente al periodo de cierre del año 2020.
Escudándose en la emergencia nacional y en la precaria situación económica en la que se encuentra el país, el gobierno evadió su responsabilidad de girar el presupuesto completo del FEES para este año, en primera instancia pidiendo un recorte de 65 000 millones de colones, los cuales, de aplicarse, hubiesen dejado prácticamente sin funcionamiento a las universidades públicas, tal y como lo reconoció el rector de la UCR, Carlos Araya.
Finalmente, el pasado 10 de Julio el Gobierno llego a un acuerdo con el CONARE y el presidente de la FEUNA de recortar un total de 48 mil millones de colones al FEES 2019. De estos 48 mil millones, 35 mil millones corresponderían a gastos de capital (infraestructura y equipo tecnológico), y unos 10 mil millones serían contabilizados en el aporte que las universidades ya giraron al fondo de emergencia del gobierno en abril pasado, al cual deberán aportar unos 3 mil millones más tras la firma del nuevo acuerdo.
Denunciamos enérgicamente la firma de este acuerdo realizado a espaldas de la comunidad universitaria por parte del CONARE y el presidente de la FEUNA, Noel Cruz. Así mismo, denunciamos la pasividad con la que el Directorio de la FEUCR ha salido a encarar dicho acuerdo ensalzando “la voluntad de las rectorías” para velar por las necesidades de los estudiantes y los trabajadores interinos en su comunicado público.
No es posible llamar a confiar en la buena voluntad y el papel que está cumpliendo el CONARE cuando éste está negociando un recorte a espaldas de la comunidad universitaria y más bien, como en el caso de la Rectoría de la UCR, está preparando recortes en las ayudas económicas de las y los estudiantes becados.
También consideramos que el llamado del Directorio de la FEUCR a que canalicemos nuestro descontento exclusiva o principalmente a través de medios digitales, arguyendo el contexto nacional de pandemia y cuarentena, es una posición que arrebata al movimiento estudiantil de su arma más poderosa para resistir a los ataques del Gobierno y de la Asamblea Legislativa: la movilización en la calle en articulación con los diversos sectores laborales de las universidades públicas y con el pueblo organizado de Costa Rica.
Desde la Juventud del PT, no les damos falsas promesas a la comunidad estudiantil atribuyéndole a los medios digitales efectos que no tienen; solamente la lucha en la calle, con las medidas sanitarias necesarias para protegernos del COVID-19, puede inclinar la balanza a favor nuestro. Numerosos pueblos de América Latina y del mundo entero tienen muy claro esto, y están saliendo a las calles en defensa de sus derechos y en rechazo al sistema capitalista. No vemos por qué en Costa Rica tenga que ser distinto.
Hoy el Gobierno PAC-FA está priorizando salvar a las grandes empresas en media pandemia del COVID-19. A estas les vienen prorrogando el pago de impuestos, rebajando las cargas sociales y permitiéndoles suspender a sus trabajadores por el tiempo que lo requieran. Sin llegar a discutir en ningún momento ningún aporte por parte de los grandes negocios para contribuir en medio de la crisis.
Advertimos que este recorte sienta un precedente nefasto que posibilita mayores recortes para lo que resta de la negociación del FEES 2021. Creemos que la comunidad universitaria, lejos de discutir cuánto recortar de su propio presupuesto para “contribuir” a la lucha contra la pandemia, debe discutir como impulsa un plan para que los grandes negocios de las grandes empresas, de las zonas francas, de las concesiones de obra pública y del agro negocio, sean quienes aporten para salir de esta gran crisis. Es un hecho que las Universidades Estatales ya están aportando con su cuantiosa investigación, entre esto el suero equino que combatirá el virus en los hospitales de la CCSS, que definitivamente requieren mayor inversión estatal.
Finalmente queremos recalcar que la victoria de archivar las propuestas de diputados de Nueva República para extraer más presupuesto del FEES, no resulta una victoria frente a los recortes que ya se dieron. Creemos que el papel de José María Villalta en la Asamblea Legislativa siendo oposición ante estas propuestas, no debe ser la única salida para enfrentarlos. Es urgente la organización de las bases universitarias, estudiantes y trabajadores, y disponernos para la lucha, sólo así es como realmente vamos a defender el FEES de los recortes que se vienen.
