COVID-19 Laboral

Protocolos para la continuidad de los negocios en la pandemia son una burla que el gobierno respalda

Por: Greivis González

San José, may 2020 (Socialismo Hoy) – Como parte de las supuestas medidas tomadas por el gobierno para la mitigación de la emergencia por el covid-19, en el mes de abril se habilitó la “Mesa de Infraestructura Productiva”, para permitir a las empresas privadas un retorno organizado a la actividad económica.

Pero llama la atención que ni en los miembros participantes de esa mesa, ni en su elaboración o contenidos, está la representación de las personas trabajadoras, perdiendo toda legitimidad, pues no se puede elaborar un documento que supuestamente pretende garantizar la salud de los trabajadores sin tenerles en cuenta.

Otro aspecto, es que se elabora una herramienta para que las empresas apliquen como medida de autoevaluación y desde ahí ellas definan si poseen un riesgo alto, medio o bajo y dependiendo del resultado puedan continuar con el negocio abierto, o corrijan medidas en menos de 24 horas o cerrar inmediatamente, que si hubiera posibilidad de organización sindical en el sector privado, las personas trabajadoras pudieran participar y emitir criterio en la calificación. Pero como el ministro expresa, él confía en la responsabilidad y rigurosidad de las empresas, mismas que no respetan los derechos laborales mínimos a uno de cada tres trabajadores, despiden a sus trabajadores si hacen el mínimo intento de organización sindical, rebajan las cuotas de la CCSS a sus empleados pero las retienen y no las reportan, despiden a las mujeres cuando saben que están embarazadas o cuando regresan de la licencia las acosan hasta que renuncian.

Y como si fuera poco, después de la autoevaluación, la empresa hace una declaración jurada de que cumplió con la Guía de Continuidad del Negocio, pero la firma que avala su autenticidad es voluntaria.

Esto deja claro que la presión de la UCCAEP ha sido efectiva y con esta burla priorizan las ganancias de los empresarios sobre la vida de los trabajadores. Por eso es importante aún en medio de esta situación tan complicada buscar los mecanismos necesarios para organizarse y continuar la lucha contra el atropello de las condiciones de vida de los trabajadores.